La domótica se ha ido adueñando de muchas de nuestras casas, con el objetivo de facilitarnos el control y la automatización inteligente de las mismas. Su uso nos ayuda en la eficiencia energética, el confort, las comunicaciones y en especial en los sistemas de seguridad. En este último grupo destaca el videoportero WiFi, un dispositivo que va conectado a la red WiFi y que podemos controlar a través de una aplicación instalada en un Smartphone o tableta y desde cualquier lugar.
Los videoporteros son un sistema de intercomunicación que establece conexión, tanto de audio como de vídeo, entre un emisor y un receptor. Su principal función consiste en aportar seguridad en el hogar a la vez que comodidad. Hasta hace bien poco, la tecnología de los videoporteros estaba supeditada a la imagen que podíamos ver a través del monitor interno de casa. Sin embargo, al implementar la tecnología WiFi se amplía la seguridad hasta incluso cuando nos encontramos en otro lugar.
A través de los dispositivos móviles podemos ver quién llama a casa y decidir si es conveniente o no abrir la puerta. Y no solo se ve a la persona que llama, sino también entablar una conversación. Se puede ver y hablar sin problemas desde cualquier lugar siempre y cuando dispongamos de una conexión a Internet. Cabe destacar la importancia del uso de antenas, en función de la configuración de la casa, para ampliar el rango de la señal.
Prestaciones de los videoporteros
Estos nuevos videoporteros también pueden disponer de las siguientes prestaciones:
- Alertas de seguridad basadas en la detección de movimiento. Cuando el dispositivo capte movimiento enviará una señal de aviso al móvil.
- Grabación de fotos y vídeos para su posterior utilización.
- Retransmisión en directo de la señal ofrecida por la cámara.
- Y dicha señal, según el fabricante y la aplicación correspondiente, se puede compartir con varias personas a la vez.
