Esta semana os hemos hablado del Happy Slapping, la moda de agredir a un compañero o compañera para compartirlo después en redes sociales. Como decíamos en este reportaje, las redes sociales están sirviendo para multiplicar el daño infringido a los acosados en el cole. Sin embargo, por nuestra experiencia como Mamitech, sabemos que las redes sociales pueden ser muy útiles y muy positivas, solo hay que saber usarlas, ¿quieres algunos consejos para enseñarles a usar las redes sociales?
Redes sociales amigas o enemigas
Redes sociales y la autoestima: apostar por los lovers y desechar los haters
Es cierto que según los datos, su nivel de ansiedad de los adolescentes ha aumentado 70% en los últimos tiempos. En realidad, no creo que esta ansiedad solo se deba al uso de las redes sociales, sino a la creciente competitividad de la sociedad que les estamos dejando. En el caso de la alta ansiedad y la baja autoestima relacionada directamente con las redes, tiene que ver con la hiper exposición a la opinión ajena y a la nomofobia (adicción a los dispositivos móviles) que, siendo honestas, casi todas tenemos en mayor o menor medida.
Sin embargo, conozco casos de adolescentes para quienes las redes sociales han sido un salvavidas. La vida en el instituto es muy cerrada y rígida. Por tanto, quienes no cumplen las normas de esa rigidez suelen tener una sensación de soledad importante, así como una vida social bastante reducida. Sin embargo, las redes sociales le darán la oportunidad de conocer a gente con la que comparte gustos. Así, si apuestan por seguir a personas con las que comparten cosas en vez de centrarse en grupos negativos, las redes le ayudarán a tener una mejor autoestima
Empatía: viajar sin salir de casa
Yo he crecido en un pueblo. Siempre he tenido mucha curiosidad. Mi único contacto con el exterior era las películas que alquilaban mis hermanos, los libros y las dos películas al año que me regalaba mi madrina. Hoy, desde ese mismo pueblo, puedo ver charlas, conferencias y congresos de todo el mundo, gracias a Youtube y puedo comentarlas en Twitter, viajar con travelbloggers y seguirlos en Instagram y facebook, pedir consejos a otros viajeros y darlos a través de Familias Activas y las redes. Enséñales, pues, que las redes son más que una traducción de su universo analógico al virtual, sino que es una forma de entrar en contacto con lo que físicamente, no puedes. Normalmente, en estas comunidades los haters brillan por su ausencia, ya que quienes se siguen mutuamente en torno a una afición o un interés no quieren odiarse, sino ayudarse
Muéstrale las opciones de reportar y bloquear
Es posible que sepan hacer mejores stories que tú y que hagan auténticas virguerías con las fotos y los vídeos. Sin embargo, esto no significa que dominen las redes mejor que nosotras. Te sorprendería saber cuántos adolescentes no saben que la opción de bloqueo y, sobre todo la de reportar, existen. Es necesario que sepan que si hay alguien grosero, maleducado o que insulta, pueden optar por bloquearlos, para que no interectatúen más con ellos, y la de reportar, para denunciarlos y que la red social tome medidas también con ellos
Control de la propia imagen
Recuérdales que aunque sea a través de una foto, su cuerpo sigue siendo su cuerpo. Por tanto, como tal, querrán tenner el mayor control sobre su cuerpo y su imagen. Dicho control es incompatible con estar constantemente posteando fotos de ti mismo o misma en situaciones íntimas, incluso cuando solo compartes ese material por amistad o por amor. Cuando envías una foto en bikini o enseñando los abdominales o cualquier otra parte de tu cuerpo, el receptor puede hacer lo que quiera con esa imagen. La pregunta es: si no le regalarías tu cuerpo ni tu intimidad a nadie, ¿por qué lo haces a través de internet?
Todo esto hay que combinarlo con nuestro propio ejemplo y con cierta vigilancia por nuestra parte, sobre todo cuando están empezando. En este sentido, lo ideal es estar al día de las modas y los contenidos que vitalizan entre los adolescentes, para poder hablarlo en casa y saber si participan o no de aquellos que pueden resultar dañinos para ellos o para otras personas.