Si le preguntas a un peque qué van a hacer este verano, una de las respuestas más habituales es “jugar a vídeo juegos“. Con tantas horas libres, se imaginan esa eterna partida que no pueden jugar durante el curso. Y la verdad es que después de todo el ajetreo de los últimos nueve meses, se lo merecen, pero, como nos avisan nuestros amigos de Pantallas Amigas y Movistar, con precaución. Los vídeo juegos pueden ser muy beneficiosos si sabemos escogerlos y si le damos el espacio justo. Por ello, Mamitech, te daremos unos tips saber cómo gestionar el asunto durante el verano.
Cómo usar bien los vídeo juegos en las vacaciones
Aunque aquí nos centramos en las vacaciones, los consejos que os daremos son válidos para todo el año. Nuestro objetivo es que sepamos aprovechar los beneficios de los vídeo juegos y minimizar sus perjuicios.
Infórmate bien antes de comprar o descargar
Recuerdo perfectamente cuál fue mi primer vídeo juego. Era el clásico Ikari Warriors de la primera Nintendo. A pesar de que ciertamente era violento, su falta de realismo, restaba también implicación emocional e intelectual. Quiero decir que sabíamos que estábamos ante una ficción muy distinta a la realidad. Con los juegos actuales hay que ser más cuidadosas. Por eso, lo mejor es saber lo que estás comprando, cuál es la línea argumental y el carácter de la misión de los gamers. Es verdad que contamos con las recomendaciones de edad, pero esto no basta.
Elege los vídeo juegos que fomenten la creatividad y el fomento de la lectura
Howard Gardner, un experto en las inteligencias múltiples, explica cómo los jóvenes actuales pueden tener problemas con la imaginación, en su libro Generación App. La razón es que en las aplicaciones móviles que usan solo pueden hacer un número limitado de cosas, por un lado, mientras son dirigidos por mensajes e instrucciones, por el otro. Sin embargo, muchos vídeo juegos requieren de mucha creatividad para superar la misión. En este caso, los de estrategia y de construcción son los mejores. Además, muchos de ellos introducen hitos históricos o mitológicos como eje argumental, algo que puede llevarlos a interesarse por los mismos e interesarse por la lectura.
Apuesta por los llamados “Party Games”
Son juegos familiares, similares, si no réplicas, a los tradicionales de mesa. Podemos jugar todos los miembros de la familia, de manera que nos acercamos a su mundo. En un momento concreto de su evolución, la distancia entre los niños y los adultos se ensancha. Creen que no entendemos nada de lo que les sucede. Por ello, compartir tiempo juntos, pero en su terreno, será muy ventajoso para la calidad de nuestra relación.
Controla los juegos on line
Una de las cosas que más les gusta es jugar a su vídeo juego favorito con sus amigos. En verano, además, muchos están de vacaciones en otros lugares, a través de ellos pueden mantener en contacto entre ellos. Sin embargo, resulta peligroso, ya que se deja la puerta abierta a otros usuarios desconocidos que pueden usar el juego en red para acceder a sus datos, acosarlos, inculcar ideas perjudiciales… Por eso, lo mejor es estar cerca cuando optan por esta modalidad
Pon el ordenador o la consola en un lugar de tránsito
Para hacer lo anterior con mayor facilidad, lo ideal es que usen los dispositivos de juego cerca de nosotros. Así, si colocamos la consola o el ordenador en el salón, estarán siempre accesibles a los adultos, de modo que los vigilaremos, sin necesidad de ser percibidos como invasores.
Limita el tiempo
Recozcámoslo, porque hasta a nosotras nos pasa: las horas se pasan volando cuando se juega. Para evitar que pasen el día haciéndolo, lo ideal es establecer un tiempo para esta actividad. Después, aunque con ciertas edades es complicado, procura que estén alejados de los dispositivos móviles y que practiquen deporte, que vayan a la playa o a cualquier otra actividad que les permita conectarse con la realidad y con personas.
Así, con estas pautas, los peques y los adolescentes disfrutarán de su pasatiempo preferido, pero sin poner en riesgo su salud y su desarrollo.