Está más que claro, Mamitech, que en un futuro no muy lejano, vamos a convivir con robots, con humanoides. Si os soy honesta, me cuesta imaginarme caminando por la calle al lado de robots idénticos a las personas. O tener en casa a un humanoide trabajando conmigo. Si compartimos tanto tiempo con ellos, ¿seremos capaces de quererlos? ¿Podremos, incluso, enamorarnos de ellos, como sucede en la película Her? ¿Qué relación emocional estableceremos con ellos? Quizá te resulta extraña la pregunta, pero piensa en tu smartphone, ¿no te resulta salir a la calle sin él? Si este tuviera aspecto de persona, ¿no llegaríamos amarlo? Pues bien, Kate Darling se dedica a estudiar todas estas cuestiones nada menos que en el MIT Media Lab, ¿quieres conocerla?
Mujeres en la tecnología: Kate Darling, experta en ética y robótica
Si algo me fascina de la robótica y de quienes se dedican a este campo, es la multidisciplinario. De hecho, me parece que las personas encargadas del diseño de los mismos deben tener una actitud muy cercana a la filosófica. Al final, como dice el Dr Ishiguro, para lograr el éxito deseado, lo más importante es saber qué es la humanidad y esto significa ser capaz de definir la esencia de las emociones esenciales. Pura metafísica, ¿no os parece? Pero Kate Darling da un paso más en este sentido. Si los robots van a sentir igual que nosotros, ¿no deberían tener derechos que los protejan de nuestros abusos? ¡La pregunta es fascinante! Por ello, porque creo que hacer dicha pregunta es propio de una mente brillante, he querido presentaros a Kate Darling, una de las mujeres más importantes en el campo de la robótica.
Pero es brillantez nunca sale de la nada. Aunque el talento es innato, es necesario alimentarlo con formación y esfuerzo. La excelencia solo puede lograrse así. Y Darling es un ejemplo de ello. Se graduó con honores en Derecho, para doctorarse después Ciencias en el Swiss Federal Institute of Technoloty de Zurich. No obstante, siempre ha tenido un enorme interés por la tecnología, por lo que pronto se insertó en este campo como investigadora. Ha estudiado los incentivos económicos por copyyright, de hecho, ha tenido un papel destacado en la cuestión de la propiedad intelectual y sus implicaciones. De hecho, hoy trabaja también como consultora en este asunto en el MIT Media Lab.
Además, es líder en ética robótica en la misma instintución. Allí, se dedica a investigar la relación con los robots a través de experimentos, especialmente centrados en los vínculos emocionales de los seres humanos y de los robotss, siempre con el objetivo de que se adopte la posición más ética posible. No en vano tenemos todo un género cinemátrográfico y literario dedicado a dar una visión apocalíptica del momento en el convivamos. Tal parece que la obsesión de Kate Darling es que no se cumplan dichos pronósiticos, que estos vengan a mejorar nuestra sociedad y no a envilecerla.
Sus conclusiones y la originalidad de sus preguntas son tales que han esta presentes en las publicaciones más emblemáticas del mundo: desde Vogue, The New Yorker, The Guardian o Forbes. Por supuesto, la plataforma TED ha contado con su presencia, para deleite de todas las amantes de la tecnología y las que tenemos curiosidad sobre cómo la revolución inminente nos afectará.
Reconozco que me tranquiliza que haya personas dedicadas a mirar la robótica desde un punto de vista ético. En ocasiones, una tiene el miedo de que la nueva era venga única y exclusivamente marcada por la búsqueda del beneficio económico. Es un alivio saber que el bienestar social es también un factor en el desarrollo de las nuevas tecnologías, que este no va a depender solo de las decisiones individuales de los usuarios, ¿no estáis de acuerdo?
